Mis viajes.Francia .Llenguadoc-Roselló i La Provence.

Mis viajes continuos al Llenguadoc-Roselló han sido por proximidad,es una parte importante de la Catalunya Nord cuya capital Montpellier he visitado en varias ocasiones, todas ellas muy cortas, como ir a pasar un par de días o salir a comer en cualquier pueblecito cerca.


Montpellier es una ciudad universitaria, donde es bonito visitar la catedral, tambien la Place de la Comédie donde se encuenra la Fontaine de Trois-Graces.


Tambien he estado varias veces en Perpignan,y recuerdo mucho un pueblecito muy pequeño con un restaurant lleno siempre a rebosar de catalanes que lo típico era comer Civet de senglar acompañado con un vino negro,fuerte y espeso que se llama Chateauneuf du Pape.


Todo lo que es El llenguadoc-Roselló pertenecía a Catalunya hasta el 1659 que se firmó el Tratado de lo Pirineos.


Fué Luis XIV el que prohibió el uso del catalán en la zona, tambien fueron disueltas todas las instituciones catalanas, a pesar de que El Tratado de los Pirineos preveía su conservación.A toda esta zona se le llama actualmente la Catalunya Nord.





Mis viajes por la Provence han sido tambien algunos cuantos,en uno de ellos llegamos hasta Génova.

El primero fué con un amiga, nos cogimos el 600, que iba fantástico y de una tirada nos pusimos en NIza, llegué muerta, no me aguantaba, mi pobre amiga no sabía conducir, como que salimos por la tarde rumbo a la Cote D'azur pues cenamos fruta, desayunamos fruta y casi que la tomamos para comer tambien,de hecho era lo más barato y la encontrábamos por la carretera donde había unas paraditas que la vendían.El llegar a Niza fué horrible, no teníamos hotel, por lo que tuvimos que empezar a buscarlo, encontramos uno que no era muy caro y que estaba detras del paseo.

Yo ya no se que hizo ella, pero yo me estiré en la cama y estuve durmiendo hasta la mañana siguiente.Al levantarnos, desayunamos y nos fuimos a la playa, allí tuvimos la suerte de conocer a dos chavales italianos que tambien pasaban unos días allí, estuvimos hablando toda la mañana y haciendo planes para los dos únicos días que nos quedaban, la verdad es que fué una animalada de juventud, tantos kilómetros para dos días...bueno, vale más no pensarlo .
Disfrutamos al máximo de aquellos dos días y volvimos a Barcelona,ella no se, pero yo agotada de tanto conducir, me prometí a mi misma no volver a repetir una cosa igual, conduciendo sin dormir casi 24 horas.

Otro de los viajes por la zona, fué con mi marido Angel, por entonces ya estábamos viviendo en la Costa Brava, decidimos que unas vacaciones no nos irían mal , tuvimos la suerte de que con los abuelos pudimos colocar a los crios y montarnos un sencillo viaje sin tope de días por La Provence que empieza en Orange y termina en Niza y disfrutar y descansar pues lo necesitábamos.
Cogimos el coche y nos pusimos rumbo a tan bonito lugar, la primera noche la pasamos en un hotel de mala muerte, que es el único que encontramos en no se que pueblo, con una tele en blanco y negro, la cama, incomodísima estaba pegada por un lado a la pared, por lo que si yo quería levantarme debía pasar por encima de él, a parte de que por la tele no se cogían muchos canales y el que mejor se veía era un concierto de LLuis Llach, el cual nos lo tragamos todo, pues era imposible poder dormir con aquel colchón.
Visitamos cantidad de lugares bellísimos,pasamos por Aigues Mortes y llegamos a un pueblo o ciudad, no lo se ya que era de noche y buscábamos un restaurant donde cenar,el pueblo se llamaba Martigues, y nosotros le bautizamos como La Martinique, allí descubrimos un petit restaurant, que fué una delicia, no debía tener más de seis mesas,todas llenas, con sus velas, los manteles a cuadros rojos, una pequeña cocina abierta al comedor y una música que llenaba los sentidos.En seguida pudimos cenar pues unos clientes marcharon rápido, recuerdo que yo comí un entrecote al poivre verd, que era riquísimo, allí estuvimos bastante rato escuchando la bonita música y disfrutando de aquella cena tan romántica.
Pasamos tambien por Marsella donde tuvimos un susto de muerte, era domingo, necesitabamos gasolina y encontrábamos todas las gasolineras cerradas, no lo entendíamos, acabamos preguntando, que cuando viajas es lo mejor, y nos dijeron que debíamos buscar una que fuera self service,pues las otras , todas cerraban los festivos.
Madre mía, lo que sufrimos hasta encontrarla, temíamos quedarnos allí en medio sin gasolina.
Al fín solucionamos el problema y pudimos continuar con nuestro viaje.
Toulon, St.Tropez, alli estuvimos dos o tres días,nos gustó muchísimo,aquellas terrazas delante del mar, lleno de gente aunque no era temporada alta,debía ser el mes de mayo, principios de junio.Luego llegamos a Nice, que decir de esta ciudad, es una maravilla, Montecarlo....que bonito todo.Entramos en Italia y lo que recordaré siempre es Portofino, nos entusiasmó, decir que es precioso es poco, de alli nos fuimos a Génova, y ya pensamos volver pues viajar en coche,cansa,aunque nos íbamos turnando es realmente agotador, ya que cuando llegas a un sitio, te pateas el lugar para conocerlo bien.
La vuelta la hicimos por Aix-en-Provence, Nimes,Montpellier, Perpignan y Girona.Estuvimos unas tres semanas disfrutando de tan maravillosos lugares, los cuales recomiendo y si no se tiene prisa, la mejor manera es ir en coche.